La sed
puede disfrazarse de hambre, por lo que quienes
están a dieta deben mantenerse hidratados
para cumplir su meta. Para lograr un descenso de
peso adecuado, nuestro organismo tiene que funcionar
correctamente y la hidratación juega un papel
muy importante.
¿Quién
necesita mas agua, los delgados o los que tienen
sobrepeso?
Todo
el que este pasado de peso tiene mas grasa que metabolizar.
Como el agua ayuda en el proceso metabólico,
es lógico que la persona gruesa requiere
más agua. También ayuda a mantener
la tonicidad muscular y a evitar que la piel se
torne flácida después de perder peso.
Cuando
los pies, manos, piernas y párpados se hinchan,
sabemos que el cuerpo está reteniendo líquidos
y esto puede ser por tres causas: consumo excesivo
de sal, insuficiencia renal y la más frecuente
,. falta de agua en su ingesta diaria. Esto es porque
el organismo en una respuesta de
autodefensa, al no recibir suficiente agua, retiene
la poca que tiene.
Es muy conocido que el agua ayuda en el estreñimiento
y en la eliminación de toxinas.
¿Cuánta
agua es suficiente?
Una
persona de estatura promedio y peso normal necesita
dos litros al día . En las personas gruesas
agregar un litro por cada 11 kilos extras
El organismo asimila más fácilmente
el agua fría que el agua a temperatura ambiente.
La
cantidad de agua que tu cuerpo necesita depende del
estilo de vida que tengas: de tu actividad física,
de tu dieta y de otros factores ambientales como el
clima y la altitud del lugar en el que vives. En general,
se recomienda tomar entre 2 y 3 litros de agua por
día (de 8 a 10 vasos), especialmente en el
verano, cuando hace más calor y tienes más
riesgo de deshidratarte.
Para
saber si estás lo suficientemente hidratado(a),
puedes tomar como referencia tu orina. Si es
demasiado amarilla y te da mucha sed, entonces necesitas
evaluar la cantidad de agua que tomas y aumentarla.
Además
del agua, hay otras opciones para mantener hidratado
a tu cuerpo. Las principales son las frutas como el
melón, las naranjas y los cítricos en
general. Les siguen las verduras como la lechuga romana,
el apio, el pepino y los tomates. Las sopas y otros
alimentos como los yogures también son buenas
fuentes de hidratación.
Por
el contrario, las bebidas azucaradas no son recomendables,
y también se aconseja eliminar el alcohol de
la dieta si lo que buscas es mantener hidratado a
tu cuerpo.
¿Haces
ejercicios? ¡Hidrátate!
La
práctica de ejercicios incrementa la tasa de
sudoración, lo que aumenta la pérdida
de agua del organismo. Esta condición
se potencia si la temperatura y humedad ambiente son
elevadas, como puede ocurrir en un día típico
de verano al ejercitarnos al aire libre.
Para
que el mecanismo de termorregulación (que permite
mantener una temperatura corporal adecuada) funcione
correctamente, es imprescindible que la cantidad de
líquido que se pierde por sudor sea recuperada.
Debemos recuperar gota a gota lo perdido para que
nuestro cuerpo pueda mantener la temperatura que necesita.
El mejor consejo es tomar un vaso de agua cada 15
ó 20 minutos de actividad.
Qué
comer y/o beber antes, durante y después de
la actividad física es un dato que todos las
personas físicamente activas deberían
conocer. Y está ligado a la fisiología
de nuestro cuerpo cuando está en movimiento.
Se estima que para nuestro requerimiento base de agua
necesitamos 1cc. de agua por cada caloría que
nos aporta una dieta. Así, si nuestra ingesta
contiene 2.000 calorías por día necesitaremos
tomar 2 litros de agua. Además, hay que sumar
las pérdidas por sudor que dependerán
de muchos factores como el clima, la intensidad del
ejercicio y el tamaño corporal, entre otros.
Las bebidas
deportivas (formuladas con carbohidratos y sales
minerales) deben tenerse en cuenta cuando el tiempo
e intensidad del entrenamiento lo requieran.
Tips
para hidratarte